Presentación 

Tengo que reconocer y agradecer a mi madre por ser ella con su propia vida el motor que ha motivado este proyecto. 
Mi madre se dio cuenta de que la relación entre hombres y mujeres no estaba bien calibrada, que se producían muchos abusos, que la mujer estaba sometida al hombre sin poder realizarse de forma autónoma.

Ella me enseño el valor de ser autónoma, de estudiar de tener mi propio trabajo, de no depender nunca económicamente de un hombre para que en la relación de pareja estuviera porque amaba, no porque dependía. Es de esa manera que desarrollé mi energía masculina.

Años más tarde descubrí que ser mujer no es algo peyorativo, que las mujeres no somos seres de segunda y que desplegando mi energía femenina me convertía en buena profesional, buena mujer y pareja, es decir, era perfecta y valiosa para mí y para el resto del mundo. Es así como fui equilibrando en mi interior la energía femenina y la masculina.